Macla Arquitectos ha realizado la decoración, tramitado la licencia de actividad y dirigido las obras.
Se ha agregado al restaurante existente un local contiguo para dotar el espacio de un bar. Se ha realizado un diseño acorde con el entorno existente, creando un diálogo tras los espacios, generando una nueva entrada y modificando las fachadas.
Se ha redistribuido el espacio de cocina y dotado el restaurante de unos locales refrigerados para la conservación y almacenamiento del género y de la bebida.
La barra se ha diseñado como un volumen sólido, por encima de la misma vuela una estructura de acero corten, cuyas proporciones resaltan la ligereza de la misma. Esta estructura tiene una doble función: enmarca la barra y la resalta por medio de las luces que alberga por un lado, y por otro alberga los armarios y funciona como un filtro para separar los diferentes espacios que la rodean, sin ser necesario levantar tabiques o colocar biombos que ensombrecerían y cerrarían el volumen.
Macla Arquitectos ha tramitado la licencia completa de la actividad como si fuera nueva, manteniendo reuniones con los técnicos municipales para simplificar al máximo el trámite y conseguir un importante ahorro para el cliente.